LOS SAHARAUIS, NO BESAMOS MANOS, NI HACEMOS CULTO A LA PERSONALIDAD.

sábado, mayo 07, 2011

No solucionar el conflicto es prolongar el éxito del mercado armamentístico

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas decidió prolongar el mandato de esta agencia en el Sahara Occidental. Sin la obligación de salvaguardar los Derechos Humanos. Coinciden varios de los asientos permanentes en éste órgano con los suministradores principales de armas a Argelia y Marruecos, embarcados en una escalada armamentística permitida por la comunidad internacional. No atreverse a proponer una solución al conflicto es prolongar el éxito del mercado armamentístico.
Sahara Occidental, una zona geostratégica y determinante ubicada al norte de África y que sirve como mecha del conflicto de baja intensidad entre Marruecos/Francia y el Frente Polisario/Argelia. Conflicto del que, por cierto, se benefician Estados Unidos, Francia, Rusia, India, España y Reino Unido con la venta de armas a los contendientes. Cuatro de ellos tienen asiento fijo en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
En medio de todo este alboroto hay alrededor de 500.000 personas y está el Frente Polisario, que también importa armas, pero a menor escala que Argelia y Marruecos, que son los que realmente hacen interesante este conflicto para el mercado armamentístico mundial.
La noticia es que la MINURSO estará un año más en el Sahara Occidental con el mandato de preparar a la población para un referéndum, a razón de unos 55 millones de dólares. Preparar a la población significa, en lenguaje de Naciones Unidas, elaborar un censo oficial para que se vote posteriormente si quieren la autodeterminación o no. Desde que se inició el mandato hasta ahora las cosas han cambiado mucho. Marruecos ejerce una autoridad sobre el territorio evidente, innegable y reconocida casi sin tapujos por la comunidad internacional. La RASD, por su parte, cada vez está más diluida. Varias potencias internacionales, como India, Alemania, Noruega, Francia, Australia y alguna más, prospectan y extraen recursos naturales del Sahara Occidental. Cada cierto tiempo, como hace poco, se levanta polvareda porque sale a la luz alguno de estas prácticas ilegales en un territorio en litigio internacional, como es el caso. Noruega, por ejemplo, recientemente retiró una flota de pesqueros de la zona. Porque para extraer recursos naturales de ahí hay que tributar al régimen marroquí, que no es el soberano, pero como si lo fuera. Las voces críticas con estas prácticas cada vez son más, pero cada vez se oyen menos. Fragmento de Analisis: Txema Santana

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